Hay Que Hablar de Culpa de Mamá

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Escrito por Eden

Culpa de mama es algo real. Es una parte inevitable de maternidad. Normalmente consume nuestras vidas y sentimos ansiosos como padres.

Antes de tener bebé, nadie me advirtió del sentimiento de culpa de mama. Por ejemplo, estaba emocionada para ver dibujos animados con mi hija, hasta que leí que ofrecerle a su hijo tiempo frente a la pantalla prácticamente la convierte en la peor madre (nunca lea foros de padres en línea), ya que es perjudicial para el desarrollo de su hijo.

…Pero es lo único que realmente distrae a mi hija si necesito media hora para preparar la cena, responder a los correos electrónicos del trabajo o simplemente tomar un descanso porque estoy exhausta. Además, le encantan los dibujos animados y, a menudo, aprende nuevas palabras o movimientos de ellos. Sabiendo esto, todavía me siento culpable al permitirle tiempo frente a la pantalla.

Otro ejemplo personal es regresando al trabajo. Nunca pensé que me sentiría culpable por volver al trabajo después de casi dos años de baja por maternidad, pero lo hago. Siento una gran culpa por poner a mi hija en la guardería cinco días a la semana, me siento culpable de no estar allí para ella tanto como ella quisiera y me siento culpable de haber dado un paso adelante en mi vida personal. y desprendiéndome un poco de la maternidad. Ser una buena madre y tener una relación cercana con mi hija es algo fundamental para mí y, por alguna razón, siento que volver al trabajo va a afectar eso, aunque seguramente debería considerarse como un paso positivo hacia adelante.

¿Son las expectativas de la sociedad las que nos hacen sentir tan culpables? ¿Es la presión adicional de las redes sociales y la imagen de la "madre perfecta"? ¿O es una sensación natural y normal causada por hormonas y sustancias químicas dentro de nuestro cerebro?

¿Qué es la culpa de mamá?

La culpa de la madre es un sentimiento generalizado de no hacer lo suficiente como padre, de tomar decisiones que pueden "arruinar" a sus hijos en el futuro o simplemente de no hacer las cosas bien. A menudo es un sentimiento temporal que aparece y desaparece, aunque para algunos ocurre con frecuencia, lo que les provoca ansiedad y sentimientos de inseguridad.

Para muchas madres, ser mamá y sentirse culpable van de la mano. La NUK realizó una encuesta sobre este tema y descubrió que de las 2.000 madres entrevistadas, el 87 por ciento se ha sentido culpable en algún momento, mientras que el 21 por ciento experimenta estos sentimientos “la mayor parte” o “todo” del tiempo.

El sentimiento de culpa de la madre puede comenzar desde el nacimiento de su hijo y durar toda la vida. No hay fecha de vencimiento para la culpa de la madre, aunque parece un patrón común que a medida que el niño llega a la edad adulta y es capaz de tomar decisiones acertadas, el sentimiento se calma un poco.

La culpa de la madre puede desencadenarse por varios eventos y situaciones diferentes. Es muy subjetivo y personal para la madre, sus creencias y sus expectativas. Sin embargo, los desencadenantes comunes de la culpa en las madres parecen ser: no poder amamantar con éxito, su hijo alcanza los hitos más lentamente que otros niños de su edad, volver al trabajo después de la licencia por maternidad, trabajar demasiado, permitirle a su hijo pasar tiempo frente a la pantalla, no leerle suficiente, o no siempre poder ofrecerle a su hijo comidas saludables.


Formas de controlar el sentimiento de culpa de la madre

La culpa de la madre es una parte inevitable de la maternidad. Por lo general, se debe a querer lo mejor para su hijo y a la mejor madre, lo cual es justo, comprensible y transmite lo maravilloso que es usted como padre. Sin embargo, no necesita estar siempre presente o robar la felicidad de situaciones relacionadas con su hijo.

La culpa de mamá necesita ser controlada y tú eres lo suficientemente poderosa para hacerlo. A continuación, se muestran algunos métodos que pueden usarse para ayudarlo:

1. Identifica que provoca la culpa de mamá

Identifica y reconoce las situaciones que te hacen sentir culpable y explóralas.

¿Tu culpa de mamá proviene de tu propia infancia? Tal vez tus padres no se involucraron lo suficiente contigo cuando eras más joven, así que ahora estás tratando de reconstruir esos bloques y compensar con tu propio hijo.

¿Quizás tu culpa se desencadena por la falta de participación en las actividades? ¿Te sientes culpable cuando otras mamás hablan de las maravillosas aventuras que tuvieron con sus hijos durante el fin de semana?

Identificar el desencadenante es una buena manera de comenzar a controlar la culpa de su madre, ya que puede comenzar a hacer cambios simples en la dirección correcta en lugar de abrumarse. Concentre su energía y tiempo limitados en áreas clave que ya sabe que marcarán la diferencia en el bienestar de su hijo y ayudarán a controlar su culpa. Por ejemplo, si se siente culpable por la falta de participación en las actividades, puede comenzar a programar el tiempo en el que participará con su hijo.

2. Acepta que eres humano

Mamás son especiales. Somos amables, amorosas, atentas, fuertes, protectoras. También, somos humanos. Recuerda no ser demasiado duro contigo mismo. Nadie es la mamá perfecta ni tiene la vida perfecta, a pesar de lo que Instagram te haga creer.

Experimentar sentimientos de tristeza, enojo o querer escapar es perfectamente normal y también lo es priorizar los asuntos sobre su bebé. Recuerda que además de ser madre, sigues siendo una persona individual con necesidades y asuntos personales. También está bien darse prioridad a sí mismo, no va a "arruinar" el futuro de su hijo. Está bien si necesita poner dibujos animados mientras responde a los correos electrónicos del trabajo, ordena la casa o hace una llamada telefónica. Es normal y necesario.


3. Maneje las decisiones difíciles de la manera correcta

Considera todos los pros y los contras de cada decisión y qué será lo mejor para su hijo a largo plazo.

Trate de tomar decisiones con sensibilidad y tranquilidad. Tomar una decisión cuando está prosperando con la culpa de mamá no es el mejor momento, ya que es probable que tome la decisión basándose en la culpa y el miedo en lugar de la realidad y los hechos.

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Si está sintiendo la culpa de mamá, ¡sepa que no estás sola! Es tan normal y una de las emociones más difíciles de controlar en la maternidad (ugh).

Si experimentas sentimientos de culpa intensos y continuos hasta el punto de afectar su vida diaria y la relación con su hijo, podría considerar asistir a sesiones de terapia. La terapia es maravillosa ya que le ofrece herramientas para ayudarlo a controlar sus emociones y vivir una vida más saludable.

Aquí en Calle Pata Salada, esperamos que tú y tu familia estén felices y saludables y también esperamos que hayan disfrutado este artículo. Si es así, por favor comparta y envíenos un DM contándonos qué le gustó.



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